Cómo mantener una dieta baja en sal fuera de casa
Introducción
En la sociedad actual, es común que muchas personas lleven una vida agitada y pasen gran parte de su tiempo fuera de casa. Esto puede dificultar mantener una dieta saludable, especialmente si deseas reducir tu consumo de sal. Sin embargo, con un poco de planificación y tomando decisiones inteligentes, es posible mantener una dieta baja en sal incluso cuando estás fuera de casa. En este artículo, te daremos consejos prácticos para lograrlo.
1. Investiga los restaurantes de antemano
Antes de salir a comer fuera de casa, investiga los restaurantes de tu área. Muchos establecimientos tienen sus menús disponibles en línea, lo que te permitirá revisar las opciones disponibles y elegir el lugar que mejor se ajuste a tus necesidades. Busca restaurantes con opciones bajas en sal o que ofrezcan la posibilidad de personalizar tus platos.
2. Habla con el personal del restaurante
Cuando llegues al restaurante, no dudes en hablar con el personal y pedir sugerencias de platos bajos en sal. Muchos restaurantes están dispuestos a adaptar sus preparaciones para satisfacer tus necesidades dietéticas. Además, puedes solicitar que no agreguen sal extra a tu comida o que te sirvan salsas y aderezos por separado, para que puedas controlar la cantidad que consumes.
3. Lleva tus propios condimentos
Siempre es buena idea llevar tus propios condimentos cuando sales a comer fuera de casa. Puedes llevar pequeñas porciones de sal baja en sodio, especias, hierbas u otros condimentos que te gusten. De esta manera, podrás sazonar tus platos según tus preferencias sin tener que preocuparte por el exceso de sal que puedan añadir en el restaurante.
4. Opta por platos frescos y sin procesar
Al elegir tus platos fuera de casa, opta por opciones frescas y sin procesar. Los alimentos procesados generalmente contienen altas cantidades de sodio para mejorar su sabor y prolongar su vida útil. Optar por ensaladas frescas, vegetales al vapor, pescados a la parrilla o carnes magras a la plancha te ayudará a mantener una dieta baja en sal.
5. Controla los tamaños de las porciones
En muchos restaurantes, las porciones suelen ser más grandes de lo necesario. Esto puede llevar a consumir más sal de la que deseas. Para evitarlo, puedes compartir platos con alguien más o pedir que te sirvan una porción más pequeña. De esta manera, controlarás la cantidad de sal que ingieres y evitarás excesos.
6. Evita los alimentos fritos y empanizados
Los alimentos fritos y empanizados suelen tener un alto contenido de sal. Opta por opciones a la parrilla, al horno o al vapor en su lugar. Si deseas disfrutar de un plato crujiente, busca alternativas como el pollo a la plancha en lugar del pollo frito. De esta manera, reducirás tu consumo de sal mientras sigues disfrutando de tus comidas fuera de casa.
Conclusión
Mantener una dieta baja en sal fuera de casa puede ser un desafío, pero no es imposible. Con un poco de planificación y elecciones inteligentes, es posible disfrutar de comidas saludables y sabrosas sin comprometer tus objetivos dietéticos. Recuerda investigar los restaurantes de antemano, hablar con el personal, llevar tus propios condimentos, optar por platos frescos y sin procesar, controlar los tamaños de las porciones y evitar los alimentos fritos y empanizados. ¡Te deseamos éxito en tu viaje hacia una dieta baja en sal!
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